En el sexo gay, la variedad de posiciones no solo incrementa el placer, sino que permite alcanzar diferentes niveles de profundidad y estimulación. Para aquellos que buscan intensificar la experiencia, la penetración profunda puede ofrecer orgasmos más intensos y un contacto más íntimo entre ambos. Aquí te dejamos una lista de las 5 mejores posiciones sexuales gay, todas diseñadas para maximizar la penetración y llevar el placer a otro nivel.
1. El Perrito (Doggy Style)

Esta es una de las posiciones más clásicas, tanto para parejas heterosexuales como homosexuales, por una razón muy clara: ofrece una penetración profunda y directa al punto P (próstata).
Cómo hacerlo:
- El receptor se coloca en cuatro patas, apoyando rodillas y manos sobre la cama o el suelo.
- El penetrador se coloca detrás, arrodillado, alineando el pene para la penetración.
- Una vez que el pene entra, el penetrador puede controlar la profundidad y velocidad empujando hacia adelante mientras el receptor arquea la espalda para permitir una penetración aún más profunda.
- Para intensificar la sensación, el receptor puede bajar más la cabeza y levantar el trasero, facilitando el acceso más profundo al ano.
Consejo extra: Usar las manos para agarrar las caderas del receptor y controlar el ritmo puede hacer que esta posición sea aún más intensa.
2. El Misionero Elevado

Aunque el misionero es una posición más conocida por ser tradicional, la variante elevada es perfecta para quienes buscan una penetración intensa y más íntima.
Cómo hacerlo:
- El receptor se recuesta de espaldas, pero en lugar de dejar las piernas en el suelo o sobre la cama, las levanta y las coloca sobre los hombros del penetrador.
- El penetrador se arrodilla o se inclina sobre el receptor, sosteniendo sus piernas en alto y acercándose lo suficiente para penetrar de forma más profunda y en ángulo hacia la próstata.
- Esta posición ofrece una vista directa y una conexión visual que puede hacerla más erótica, mientras que la penetración es directa y con mucho control.
Consejo extra: Colocar una almohada bajo las caderas del receptor puede inclinar su pelvis hacia arriba, aumentando aún más la profundidad de la penetración.
3. La Carretilla
La carretilla es una posición que no solo permite una penetración profunda, sino que también añade un nivel de actividad física para ambos, haciéndola más intensa y dinámica.
Cómo hacerlo:
- El receptor se inclina hacia adelante, apoyando las manos en el suelo o en la cama.
- El penetrador levanta las piernas del receptor, sujetando sus muslos o caderas, mientras se coloca de pie o arrodillado detrás de él.
- Con las piernas del receptor elevadas y la espalda inclinada, el pene puede entrar profundamente, llegando fácilmente a estimular la próstata.
- El receptor puede usar sus manos para mantener el equilibrio y, al mismo tiempo, moverse hacia adelante y hacia atrás al ritmo de la penetración.
Consejo extra: Esta posición requiere algo de fuerza, por lo que es ideal combinarla con movimientos más lentos al principio para asegurar el equilibrio y aumentar el placer con el tiempo.
4. El Vaquero Invertido (Reverse Cowboy)

El vaquero invertido le da al receptor el control absoluto sobre la profundidad y el ritmo de la penetración, y al mismo tiempo permite que el penetrador disfrute de una visión única.
Cómo hacerlo:
- El penetrador se recuesta boca arriba, manteniendo el pene erecto hacia arriba.
- El receptor se sienta encima de él, dándole la espalda, y baja lentamente sobre el pene.
- Una vez dentro, el receptor puede controlar la profundidad de la penetración, subiendo y bajando a su propio ritmo.
- Al arquear la espalda y mantener las manos sobre los muslos del penetrador, el receptor puede permitir una penetración más profunda y precisa.
Consejo extra: El receptor puede inclinarse hacia adelante para un ángulo aún más profundo y directo hacia la próstata, lo que aumenta la sensación de placer.
5. El Trono (The Chair)
El trono es una posición que ofrece tanto profundidad como intimidad. Perfecta para quienes disfrutan de un contacto cercano mientras buscan maximizar la penetración.

Cómo hacerlo:
- El penetrador se sienta en una silla con los pies firmemente en el suelo.
- El receptor se sienta encima de él, de espaldas, apoyando las manos sobre las rodillas del penetrador o en los brazos de la silla.
- A medida que el receptor baja sobre el pene, la gravedad y la posición sentada permiten que el pene entre profundamente.
- El receptor puede controlar el ritmo y la profundidad mientras el penetrador lo sostiene por la cintura o las caderas.
Consejo extra: El receptor puede inclinarse hacia atrás contra el pecho del penetrador para mayor comodidad y mejor acceso a una penetración profunda.
Estas posiciones están diseñadas para quienes buscan una penetración intensa y profunda.